Preparar la canastilla del bebé es una tarea apasionante, pero al mismo tiempo difícil, especialmente para los papás primerizos. La cantidad de ropa de cuna y de artículos textiles para bebé es tan grande que a veces se hace difícil saber lo que realmente se necesita. Con esta guía, nuestro objetivo es ayudar a los padres a entender cuáles son los productos textiles básicos para el día a día del bebé y para qué sirven, para que así sea más fácil elegir lo que debería ser parte del ajuar de su hijo.
Sábanas para cunas
Las sábanas infantiles constan generalmente de tres partes: la sábana superior, la bajera y la funda de almohada. Se puede elegir entre diferentes medidas de acuerdo con la cama que tenga en ese momento 50 x 80cm, si está usando una mini-cuna, 60 x 120cm, si optamos por una cuna convencional, y hasta 70 x 140cm o 80 x 130cm, cuando se utiliza una gran cuna o una cama convertible.
Se recomienda tener más de un conjunto de sábanas ya que el bebé, sobretodo al principio, suele devolver mucho después de las comidas. Normalmente la bajera es la que se suele ensuciar con más frecuencia y, por eso a menudo se vende por separado, para evitar tener que comprar un juego completo.
Protectores de colchón
Cuando tenemos bebés en casa, solemos tener imprevistos casi a diario: regurgitaciones de leche, escapadas del pañal, vómitos… Lo que suele significar un montón de ropa de cama sucia y quizás incluso el colchón. Por eso, tenemos que intentar evitar que el líquido llegue hasta el colchón ya que cuando esto sucede, el lavado es bastante complicado y algunas veces es bastante difícil eliminar las manchas y el olor que queda.
Por lo tanto, es aconsejable utilizar un protector de colchón a prueba de agua entre el colchón y la sábana bajera. Es importante que además de impermeable, sea transpirable para garantizar la comodidad del niño y una larga vida útil del colchón.
La colcha y el protector de la cuna
Las colchas para bebé deben ser de materiales adecuados y deben cumplir con algunas características específicas. Por lo general son de algodón y sus rellenos no son muy densos para que no pesen y para evitar que el bebé pase demasiado calor. Es posible escoger conjuntos textiles para la habitación del bebé con un mismo diseño. O, combina sólo unas pocas piezas, como la colcha y el protector de la cuna, por ejemplo.
El protector de cuna es también un accesorio muy práctico. Cuando se coloca, se evitan golpes con los laterales y el cabecero de la cuna en la cabeza, se previene que saquen los bracitos o las piernas por los barrotes mientras duermen o que el chupete se caiga al suelo durante la noche. Si los bebés se mueven mucho, hay quienes incluso ponen dos protectores en todo el perímetro de la cuna, así el bebé puede moverse sin peligro.
La manta
Las mantas para bebés son otro de los textiles esenciales ya que además de para envolver al bebé sirven para un montón de cosas más. Es necesario incluir una en la bolsa maternal que llevaremos al hospital ya que, poco después del nacimiento se envuelve al bebé cuando todavía está en la sala de partos. También se utiliza para dar mayor calidez al niño si nos encontramos en un lugar con una temperatura más baja o si hay que llevarlo a otro sitio.
Hay mantas de bebé de diferentes materiales: algodón 100% para estaciones más cálidas y de tipo terciopelo sintético o lana para las estaciones más frías. Para elegir cuál es la más adecuada, sólo es necesario tener en cuenta la época del año en la que tenemos previsto utilizarla. No hay que olvidar que la manta debe ser ligera y no debe tener flecos o partes que se puedan soltar y asfixiar al bebé.
Asimismo, existen mantas-capa muy prácticas para «vestir» el bebé y abrigarle muy fácilmente. Están hechas de diferentes materiales y, en algunos casos, el exterior y el interior está hecho de diferentes materiales. Se trata pues de una buena apuesta.
El edredón
Como en el caso de las sábanas, también hay diferentes dimensiones de edredones para cuna aunque es poco frecuente encontrar edredones con el tamaño apropiado para una mini cuna y es que no es aconsejable el uso de este tipo de cobertura antes de los 18 meses. A partir de esta edad, se puede y se debe optar por este artículo de textil, ya que en la temporada de frío es lo más cálido y cómodo para el niño.
Una vez tomada la decisión de compra, lo mejor es optar por un edredón lavable y antialérgico, ya que las cosas de los niños tienen que lavarse a menudo y es cada vez más frecuente que desarrollen alergias a ciertos materiales.
La muselina
¿Habías oído hablar de las sábanas muselina o de muselina de bebé? Últimamente están muy de moda y hay buenas razones para ello. Esta hermosa y moderna sustituta de los viejos «pañales de tela», está hecha de una tela muy fina y transpirable y generalmente tiene 1,2m x 1,2m. Sus usos son muy diversos. A menudo se utiliza para cubrir al bebé durante los meses de calor, en momentos en los que una manta sería demasiado y también sirve para poner en el portabebés o capazo y así proteger al bebé de la luz o del aire acondicionado en lugares públicos, mientras se duerme. Las madres lactantes también lo suelen usar para dar de amamantar en lugares públicos con lo que consiguen una mayor privacidad, al colocárselo sobre los hombros y ocultar un poco el bebé. Incluso se puede utilizar como una mesa improvisada para el cambio de pañal.
Existen muselinas de diferentes materiales: las primeras en aparecer fueron en algodón 100%, que siguen teniendo un gran éxito. Sin embargo, varios fabricantes apuestan por nuevos materiales: una es la fibra de bambú, lo que las hace extremadamente suaves y es ideal para la delicada piel del bebé; el otro es el algodón orgánico de producción ecológica y responsable, que evita los productos químicos en el proceso de cultivo y de fabricación. Además de los materiales, también se puede elegir entre una gran variedad de hermosos modelos.
Por si todo esto fuera poco, las muselinas tienen otras ventajas: plegadas ocupan poco espacio, no necesitan ser planchadas y, al estar hechas de un tejido tan fino, se secan muy rápido.
La capa de baño
La capa de baño tiene la función de una toalla, con la particularidad de que una de sus esquinas está doblada y es la parte que se pone sobre la cabecita del bebé. Hay diferentes medidas y diferentes calidades de rizo. Recomendamos los que son 100% algodón.
Una versión moderna de la capa de baño es la toalla-delantal, una capa de baño con algunos clips o tiras de tipo delantal para mamá o papá, y que permite tener dos brazos libres para coger al bebé en la bañera, recogerlo y colocarlo sobre la toalla.
A continuación, sólo hay que colocar la parte inferior de la toalla y cubrir al niño. Es muy práctica cuando el bebé es muy pequeño y sólo hay una persona para darle el baño.
La funda del vestidor
La funda se usa para cubrir el cambiador del bebé y hacer que éste sea más agradable al tacto que sólo el plástico. En general, las medidas son estándar, por lo que se adaptan a la mayoría de los cambiadores: 50 x 70cm o 50 x 80cm.
La recomendación es tener por lo menos dos fundas de vestidor porque su uso es muy intensivo sobretodo los primeros meses del bebé y por el cambio del pañal, ya que es cuando las deposiciones son más líquidas y es habitual encontrarse algún que otro escape. Los más comunes son los colores lisos, y también se pueden elegir colores que coincidan con los tonos de la habitación del niño. En los últimos tiempos se está comercializando fundas de algodón con diseños muy decorativos y que dan un toque sofisticado al dormitorio del bebé.
Creemos que estos son los textiles esenciales para el bebé. En nuestras colecciones de textiles, se puede encontrar todo lo necesario para la canastilla del bebé de las más prestigiosas marcas de cuidado de niños: Babymoov, Petit Praia, Kaloo, Bolin Bolon, Micuna o BabyBjörn.
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