¿Qué habría sido de W.A. Mozart si su padre hubiese sido carpintero? ¿Habría formulado Einstein la teoría de la relatividad de haber nacido en un país menos desarrollado? ¿El genio nace o se hace?
Dejando a un lado la capacidad intelectual de partida de cada uno, lo que está claro, es que propiciar un entorno altamente estimulante ayudará a que el bebé desarrolle todas sus potencialidades. Si en casa se escucha tocar música a menudo, o hablar otro idioma además del habitual, lo más probable es que los pequeños tengan mayor facilidad a la hora de trabajar con estas disciplinas.
Existen escuelas y también padres que trabajan en la estimulación temprana mediante bits de inteligencia. Es un método sencillo que amplía bastamente el vocabulario de los niños a la vez que les prepara para la lecto-escritura y les ayuda a desarrollar la concentración.
Los bits de inteligencia son tarjetas en las que aparece una foto o dibujo de un objeto, animal, personaje… con su nombre y que se han diseñado específicamente para ayudar a los niños a través de la estimulación del lenguaje. Para aplicar este método, tan solo es necesario escoger un momento del día adecuado, normalmente a primera hora de la mañana, tras el desayuno y/o tras la siesta…., que es cuando los niños están más despejados y receptivos. Entonces, se les mostrará una serie de tarjetas, una tras otra, al tiempo que se va enunciando qué o quien es el que aparece en cada ocasión. Esta actividad debe durar poco, de 2 a 5 minutos dependiendo de la edad de los niños, que debe situarse entre el nacimiento y los 6 años.
Los bits se pueden agrupar por categorías, tipos de frutas, hortalizas, insectos, monumentos, razas de perros, banderas, etc., Los niños a los que se les ha proporcionado una correcta estimulación del lenguaje con regularidad y durante un espacio de tiempo lo suficientemente largo, experimentan resultados sorprendentes, suelen emplear un mayor número de palabras para describir su entorno y vamos a tener la impresión de que realmente son pequeños genios aun cuando sabemos que es el resultado de una correcta estimulación infantil.
Cuando ya son algo más mayores, podemos seguir ayudándoles en la adquisición de nuevos conocimientos y vocablos a través de juegos estimulantes como los puzles con contenido didáctico, mapa-mundis, puzles de historia, del cuerpo humano… o juegos donde se formulen preguntas del tipo ¿quién inventó…? o ¿cuál es la traducción al inglés de….?.
Disponer de un amplio vocabulario es importantísimo para el niño y le reportará múltiples ventajas. Para empezar, cuanto más vocabulario tenga el niño, mayor será la comprensión lectora y mayor la riqueza a la hora de redactar sus trabajos y exámenes. Se trata de algo tan sencillo como entender correctamente lo que estudian o lo que les preguntan en el examen.
Esto se traduce en mejores resultados académicos y probablemente con menor esfuerzo que si se dispone de un vocabulario más limitado.
Además, mirando ya hacia su futuro, disponer y hacer uso de un rico vocabulario, es propio de personas formadas y educadas, lo cual le puede reportar también buenos réditos a nivel personal y laboral.
En definitiva, nunca es demasiado temprano para iniciar a los bebés en la adquisición de nuevos conceptos, usados correctamente y evitando en lo posible palabras que no significan nada como “popo”,“pipo”…incluso diminutivos.
Ya que deben hacer el esfuerzo de aprender, mejor que lo hagan correctamente.
