Quizás a veces te acuerdes de lo fácil que era salir de casa antes de que llegara esa pequeña maravilla llamada bebé a tu vida. Ahora siempre tienes la sensación de que te dejas algo, y es que, es tan fácil olvidarse de alguna cosa…
Pero bueno, vayamos primero a por los imprescindibles, y luego, si queda espacio, para todo lo demás.
1- Un buen bolso cambiador ¿Y qué entendemos por un buen bolso? Pues uno que sea fácil y cómodo de abrir, y que puedas ver bien su interior. Es muy importante que los cierres estén bien reforzados y que las cremalleras sean de gran calidad, porque lo vas a usar intensivamente y es fácil que se rompa por estas zonas.
Es importante también fijarse en el material del que está hecho, para que resista bien el peso y para que sea fácil de limpiar ¡Y muy importante! Que tenga diferentes compartimentos, porque de lo contrario, vas a revolver el bolso de arriba abajo y lo vas a tener que ordenar continuamente.
Si tiene una zona destinada a ropa húmeda y otra con asilamiento para preservar los alimentos, mucho mejor, eso será de gran ayuda. Y la correa, que sea ancha, para que si tienes que llevarlo encima, sea cómodo. Mira además que el bolso se pueda adaptar bien a tu silla de bebe.
2- Normalmente, los bolsos para carritos de bebé incluyen un cambiador, pero si no es el caso, deberás hacerte con uno que al plegarlo quede muy compacto para que no estorbe ni ocupe mucho espacio. Mejor con un poco de acolchado y que sea fácil de limpiar.
3- Las toallitas, imprescindibles. Quienes deseen otras opciones para hacer el cambio de pañal, deberán hacerse con un recipiente para llevar una esponjita y un poco de jabón.
4- Los pañales, si, pero.. ¿Cuántos? En una salida normal, para pasear, ir de compras…3 serán más que suficiente. En caso de urgencia, siempre puedes comprar más.
5- Mínimo un body de recambio, y aconsejable, una muda entera porqué es muy, muy fácil que se ensucien por completo ¡A todos nos ha pasado!
6- Y dependiendo de la edad, deberemos incluir opciones para comer. Biberón, potitos o termos con papillas, sin olvidar el babero y los cubiertos.
7- Si todavía tienes espacio, puedes incluir un pequeño frasquito de colonia y un peine para que tu peque siempre esté guapísimo o guapísima. También es buena idea llevar algún pequeño juguetito como recurso por si tenemos una crisis de llanto, para compensar largas esperas o sencillamente, para que se entretenga. Recuerda ir cambiando los juguetes, incluso los que ya forman parte del cochecito, por que acaban por no hacerles caso.
¡Por cierto! No olvides el billetero y las llaves. Hay fabricantes que tienen esto muy en cuenta y que incluyen bolsillos en la parte externa del bolso pensando en separar estos artículos de los del bebé.
En resumen, si estás pensando en hacerte con un bolso cambiador, piensa que hay para todos los gustos, tamaños y colores.
