Por placer o por necesidad, hay bebés que van de viaje nada más nacer. Empiezan pronto a explorar el mundo que les rodea aunque no sepan muy bien qué pasa a su alrededor. Son sus padres quienes deben planificarse en un trabajo que no resulta nada fácil ¿Cuánta ropa va a hacer falta? ¿Dónde va a descansar? ¿Cómo lo haremos con las tomas? Esterilizar, calentar, cambiar… Es una labor ardua pero está casi todo inventado para facilitar la vida a los padres.
En primer lugar, proponemos una lista de artículos y consejos que pueden ser muy necesarios al viajar con niños:
– Un buen bolso con cambiador con varios compartimentos. Si puede ser, con espacio destinado exclusivo para ropa manchada o húmeda para que no nos estropee el resto de accesorios.
– Varios chupetes, es fácil que se caigan y se pierdan en los viajes.
– Pañales, toallitas limpiadoras y muy importante, una buena crema para las irritaciones.
– Ropa de recambio. Accesorios para el baño como un jabón suave, una hidratante y un peine. Mejor 2 pares de zapatitos, es usual perderlos en los viajes con todo el trajín.
– Biberones, agua, leche y dosificador, potitos, etc.,
– Antitérmicos infantiles (por si acaso).
– Si vais a pasar más de un día fuera de casa, las bañeras para bebé, una cuna de viaje plegable y una mochila portabebés.
– Si hace frío, alguna mantita de más es mejor que de menos.
– Un calentador de biberones, un esterilizador y un par de cucharillas para las mezclas y las tomas.
¿Y cómo nos organizamos para viajar con bebés? Lo primero, las tomas. Si el bebé toma el pecho en exclusiva, este asunto se simplifica mucho, pero si toma biberones, deberemos viajar con dispositivos adicionales o prever que allí donde vayamos haya el equipo necesario.
Existen calentadores de bibi que se enchufan a la toma del encendedor del coche y que en pocos minutos ya han calentado el agua. Algunos, incluso, calientan potitos. Es una solución rápida y sencilla al alcance de todos los bolsillos y que nos da la libertad de calentar en cualquier momento sin depender de horarios o lugares.
Pero ¿y el tema del esterilizado de los biberones o de los chupetes? Existen esterilizadores para introducir en el microondas o esterilizadores eléctricos que realizan esta labor en muy poco tiempo. Los de microondas pueden hacerlo en menos de ¡3 minutos!, los eléctricos en 6, todo depende del modelo escogido. De este modo, podrás proseguir con el viaje sin demasiadas demoras.
Tampoco va a hacer falta que te lleves todo el bote de leche en polvo, por lo menos en el bolso de viaje. Existen dosificadores que ocupan poco espacio y que puedes rellenar con las cantidades justas para hasta 4 tomas.
Y ¿cómo planificamos sus descansos? Si para las tomas está todo previsto, para los descansos te van a sobrar opciones. ¿Lo más? bolsos-cuna para que el bebé duerma cuando y donde quiera. A partir de aquí, se abre un abanico de opciones que sólo va a depender del espacio y del presupuesto que tengas en mente. Cunas, moisés, pop-ups y colchones plegables cubren esta necesidad y ocupan realmente poco.
¿Y la higiene? La gran mayoría de bolsos de silla de paseo para padres con bebés vienen con el cambiador incorporado y ni se notan, apenas abultan. Si deseas que el cambiador sea todavía más cómodo, tienes la opción de los cambiadores inflables. Y para el tema del baño, existen ingeniosas bañeras hinchables o plegables que puedes preparar en un santiamén y que ocupan muy poco espacio.
Y cuando llegues a destino, lo más probable es que hagáis diferentes visitas y el carrito de bebé no siempre es apto para todos los lugares o terrenos. Es bueno tener la opción de transportar al bebé en una cómoda mochila portabebés en la que además, se pueden echar algunas cabezaditas con el agradable y mullidito contacto con los papás.
Ahora ya sólo cabe esperar que el viaje sea de lo más agradable posible ¡sin retrasos ni retenciones!
