El xilófono es uno de los instrumentos de percusión más conocidos y seguramente más antiguos. Se cree que nació en el sureste de Asia hace muchísimos años, cuando se colocaban láminas de madera encima de las piernas de las personas y se golpeaban para provocar sonidos. Después, el instrumento pasó a África, y posteriormente a Latinoamérica, donde se popularizó como “marimba”. Finalmente, llegó a Europa: la primera mención del xilófono en continente europeo fue en 1511. Hoy en día es muy frecuente encontrar el xilófono como miembro de la orquesta, e incluso con composiciones propias como solista. Su tono es dulce, melódico y agradable.
El xilófono se utiliza mucho en colegios, guarderías y espacios infantiles porque, además, tiene muchos beneficios para los más pequeños. Estimula su sentido rítmico, favorece la motricidad y el movimiento, permite una mayor coordinació mano-ojo e incrementa la concentración. Al mismo tiempo, como les obliga a moverse y a hacer ejercicio físico, es una forma ideal para que descarguen energía y se cansen. Y, finalmente, como muchos xilófonos tienen las barras de diferentes colores, pueden actuar como refuerzo para el reconocimiento de cada uno de ellos.
Nuestro Xilófono arco iris, por ejemplo, no solo puede reforzar el reconocimiento de los colores, sino también el de los números, ya que muestra las cifras del 1 al 8 en cada pieza. Además, sus cuatro partes encajan de diferentes maneras, como se si tratara de un puzzle.
El modelo arco iris se puede usar a partir de 2 años, mientras que el Xilófono de madera y metal ya es un poco más avanzado, para mayores de 3 años. Las piezas son de diferentes colores, de unos tonos un poco más pastel, pero muy bonitos. ¡Y suena muy bien!
Si buscamos un xilófono de madera, en lugar de metal, una buena opción son los diferentes modelos que ofrece la marca Hape. Como la Guitarra xilófono multicolor 2 en 1, que no solo es un xilófono, sino que encima, ¡tiene forma de guitarra!
Y de Hape también traemos otra idea muy original, el Golpea pelotas xilófono, que combina el instrumento con un juego de coordinación de tres bolas que caen sobre el xilófono y producen sonidos. También se puede extraer el instrumento para tocarlo de forma independiente. Este juguete es una herramienta ideal para hacer que los niños comprendan el principio de causa-efecto.
¿Os han parecido interesantes estas propuestas de xilófonos? ¡Pues no os perdáis nuestra colección de instrumentos musicales de juguete para niños y juguetes de estimulación y manipulación para bebés!
